La tarde de ayer, el personal del Congreso del Estado, recibió dos oficios.
Uno proveniente de la Junta de Gobierno, órgano creado al vapor hace unos días por el Grupo Parlamentario de Morena, donde informaba que las vacaciones comenzaban a partir de ese mismo día, es decir, del lunes 10 de julio y concluían el próximo 31 de julio.
Ese aviso era firmado por la diputada local morenista Úrsula Patricia Salazar Mojica.
El otro oficio fue girado por la Junta de Coordinación Política (Jucopo), la que, a partir de una decisión del Tribunal Electoral de Tamaulipas, se encuentra en manos del Grupo Parlamentario del PAN.
Ahí se informaba que el periodo vacacional comienza el próximo lunes 17 de julio y concluye el 31 de julio… a la par de las vacaciones que tomarán los trabajadores del gobierno estatal.
Este documento era suscrito por el legislador local Félix García Aguiar, conocido como ‘El Moyo’, un panista que recibe órdenes del exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca.
La pregunta que se hacen todos los trabajadores del Congreso del Estado es: ¿A quién le hacen caso? ¿A la Junta de Gobierno color guinda o a la Junta de Coordinación Política blanquiazul?
Este es un ejemplo del caos que se vive en el Congreso de Tamaulipas, producto de la polarización política entre dos fuerzas que se pelean el control de un Poder republicano, un Poder desde el que se pueden impulsar o frenar las iniciativas del Ejecutivo, un Poder fundamental para darle viabilidad a la gobernabilidad del estado.
Esto es algo que nunca se había presentado en la historia del Legislativo tamaulipeco, es algo inédito: la existencia de dos órganos de gobierno.
Actualmente, en tres estados existen Juntas de Gobierno en sus Congresos: Coahuila, Guanajuato y Baja California Sur… pero no hay Juntas de Coordinación Política. En Tamaulipas existen ambas, lo que vuelve confuso e incierto la operatividad legislativa, política y administrativa.
Con la decisión del Tribunal Electoral de Tamaulipas de su lado, los panistas tomaron ayer las oficinas de la Junta de Coordinación Política.
Un hecho es condenable: la diputada local panista Leticia Sánchez Guillermo golpeó, de una cachetada, al coordinador de Comunicación Social del Congreso del Estado, José Inés Figueroa, el único funcionario que se encontraba en el recinto.
Golpear con una cachetada a un funcionario es violencia. Es una agresión. Es algo que no se debe permitir. Fue un exceso de la diputada panista.
La historia de Leticia Sánchez Guillermo todos la conocen: ganó su reelección con la bandera de Morena y después traicionó a la 4T. Fue una de las legisladoras morenistas que cambiaron de partido a partir de ‘los billetazos’ que presuntamente soltó el gobierno cabecista. Luego volvió a la causa morenista y, finalmente, se quedó en el bando panista. Por esos ‘brincos’, ella carece de credibilidad. La historia juzgará con dureza a Leticia Sánchez Guillermo.
Algo más fue sumamente criticable: la presencia de los diputados federales panistas Gerardo Peña Flores, Oscar Almaraz Smer y Vicente Verástegui Ostos. Ellos no tenían nada qué hacer en el Congreso del Estado.
Gerardo Peña cree que sigue siendo líder del Congreso del Estado. Lo que debe hacer es ponerse a trabajar en el Congreso de San Lázaro, a donde llegó por la vía de la representación proporcional ya que perdió de manera estrepitosa en las urnas.
De hecho, el PAN perdió de forma estrepitosa la mayoría del Congreso del Estado en la elección del 2021. Perdió 16 de los 22 distritos. Morena ganó la mayoría en las urnas, con el voto de los ciudadanos.
Sin embargo, Cabeza de Vaca recuperó el control del Congreso del Estado a ‘billetazos’. Compró conciencias… y colocó a ‘El Moyo’ al frente de la Junta de Coordinación Política en marzo del año pasado.
Desde entonces viene la disputa por el Poder Legislativo estatal. El PAN, por ejemplo, se quejaba ayer de la presencia de la Guardia Nacional, pero olvida que, en su momento, cuando tenían la gubernatura, llamaron a la Policía Estatal para resguardar el recinto.
Los panistas también olvidan que, en su momento, no tomaron en cuenta una resolución del Tribunal Electoral de Tamaulipas, ya que fue favorable a Morena. Ahora, como la opinión mayoritaria de los magistrados electorales fue a su favor, los panistas dan brincos de júbilo.
Pero los morenistas también tienen gran culpa en el relajo político y jurídico que se vive en el Congreso del Estado. Es evidente la falta de capacidad para construir acuerdos.
Esa responsabilidad recae, por supuesto, en la diputada local Úrsula Patricia Salazar Mojica. Ante su falta de control, surgen las preguntas: ¿Le faltan asesores experimentados? ¿No se deja ayudar o se ha quedado sola?
Algo sí está claro: la Secretaría General de Gobierno no aparece por ningún lado en la disputa que se vive en el Congreso del Estado. La pregunta es muy sencilla: ¿Por qué?
Queda una duda: ¿Alguien la está ‘calabaceando’?
SELLAN COLABORACIÓN CIUDAD MADERO Y SAN ANTONIO, SAN LUIS POTOSÍ
Adrián Oseguera, alcalde de Ciudad Madero, recibió en su oficina a su homólogo de San Antonio, municipio de San Luis Potosí, Edyunary Castillo Hernández.
El motivo de la reunión fue coordinar la visita de 600 personas de la tercera edad que viven en ese poblado potosino a la Playa de Miramar.
La visita se realizará a finales de este mes de julio y se hará en tres bloques, es decir, serán grupos de 200 adultos mayores los que lleguen al máximo paseo turístico del sur de Tamaulipas.
San Antonio es un municipio que se localiza en la zona huasteca potosina y tiene una característica inconfundible: casi el 100 por ciento de su población es indígena Tének.
Los dos presidentes municipales dialogaron sobre la atención recreativa y de salud que recibirán los 600 abuelitos que visitarán la Playa de Miramar.
Para ello, Adrián Oseguera instruyó a las direcciones de Turismo, Bienestar Social y del Adulto Mayor prestar todas las atenciones a los visitantes de San Antonio, San Luis Potosí.
Y PARA CERRAR…
Los diputados federales tamaulipecos de Morena y del Partido Verde suscribieron un posicionamiento ante los lamentables hechos registrados ayer en el Congreso de Tamaulipas.
Los legisladores de la 4T expresaron su ‘contundente rechazo a la toma violenta llevada a cabo por la bancada del PAN’.
Morenistas y verdes se comprometieron a seguir luchando porque prevalezca la democracia y el Estado de Derecho en Tamaulipas.
Firmaron el documento Olga Juliana Elizondo, Claudia Hernández, Ana Laura Huerta Valdovinos, Blanca Narro Panameño, Elva Vigil Hernández, Erasmo González Robledo y Juan González Lima.
